Hasta el momento, ningún gobierno ha dejado colapsar su sistema financiero. Ha hecho y hará hasta lo imposible para evitar que eso suceda, ¿pero qué pasaría si se deja de colapsar?
Sin duda la economía real colapsaría junto con ella, puesto que esta depende fuertemente del sistema financiero para funcionar. La economía real está sujeta fuertemente a la deuda, depende de ella, y si el sistema financiero colapsa, no habrá forma de obtener liquidez mediante el endeudamiento, y sin liquidez, todo el sistema colapsa.
Si el sistema financiero interno de un país colapsa, se afecta algo que se llama confianza, y sin confianza nadie le prestará dinero, aunque lo tengan.
Lo que le pasaría a un país que deje colapsar su sistema financiero, es lo mismo que le pasa a una familia en la que todos sus miembros son reportados a las centrales de riesgos. Ningún banco les prestará dinero. Ningún establecimiento les venderá a crédito. El trauma es muy severo.
Recordemos que el mismo estado depende de la deuda. Todos los países del mundo tienen una enorme deuda externa, deuda que por supuesto es con el sistema financiero. Si un estado deja colapsar el sistema financiero interno, el estado mismo se quedará sin financiación, y eso es grave. Ningún político está dispuesto a trabajar donde no hay dinero para cobrarse o para robarse.
Si un país no puede conseguir dinero en el mercado financiero internacional, se quedará sin recursos para funcionar, puesto que los recursos propios no le serán suficientes. Eso es algo impensable, por tanto es improbable que un gobierno deje colapsar a su sistema financiero. Si es necesario, le regalará dinero, por no lo dejará caer. Y eso lo saben los bancos, y juegan con ello muy bien.
Se especula que el sistema financiero en los Estados unidos es dueño de aproximadamente el 60% de todos los bienes del país, es decir, son amos y señores de casi todo. Controlan la economía. Y es creíble. Todas las empresas están endeudas con un banco. Si no pagan serán propiedad del banco. Si no aceptan las condiciones del banco, desaparecerán. Y si las empresas están en manos de los bancos, ni qué decir de las familias, de la gente del común, que tienen deudas de 5, 10, 15, 20, 30 y hasta cuarenta años. No se puede dejar colapsar un sistema que controla mucho más de lo que nos imaginamos. O no se ha preguntado la gente dónde es que le pagan su sueldo, dónde es que paga las facturas, sus servicios. Es en el banco donde la gente, las empresas y el mismo estado tienen el dinero. Todo pasa por el banco y si este se quiebra, el resultado es catastrófico.
Situación por EE.UU y Europa.
La situación del sistema financiero es delicada, principalmente en EEUU, pero no es previsible que se llegue a colapsar, si se entiende el término por destrucción o ruina de una institución. Diversos expertos recuerdan que ha habido crisis antes. El corralito en Argentina resultó un duro golpe para el ahorro de aquel país, y los bancos acabaron recuperándose, pese a las cuantiosas pérdidas que acumularon. En Europa algunas entidades se han visto obligadas a ampliaciones de capital.
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